miércoles, 29 de junio de 2016

Rivera, no te columpies…



En un rápido repaso a los datos reales del 26J vemos lo siguiente:

   - 1/ En España hay 34.546.295 votantes de los que votaron 24.161.083 personas.

   - 2/ 7.906.185 de los anteriores lo hicieron al Partido Popular.


   - 3/ 16.254.898 personas no solo no votaron al Partido Popular, sino que lo hicieron manifiestamente en contra (exceptuando nulos y en blanco)


   - 4/ Visto lo anterior, el Partido Popular ha ganado las elecciones, pero con un 67 % de los votantes en contra.


     Teniendo en cuenta que en absolutamente ninguna papeleta aparecía Mariano Rajoy como candidato a la Presidencia del Gobierno (únicamente en la papeleta al Congreso por Madrid aparecía como Diputado número 1), el resto de Grupos Parlamentarios, que representan a unos 15.800.000 votantes tienen todo el derecho a proponer a otro candidato a la Presidencia, tal y como establece nuestra Constitución.


     Es un hecho comprensible que la gran mayoría parlamentaria no quiera a Mariano Rajoy como presidente, pues por muy buena persona que sea no deja de ser un portero repetidamente goleado, pero la autodenominada “nueva política” no puede erigirse en abanderada de la política "antisillones" y comenzar ahora el discurso con la condición sine qua non del veto a tres. Del mismo modo que el PP tiene que entender que es el más votado, pero en minoría absoluta; si quiere pactar, la mayoría absoluta del resto puede y debe exigir condiciones.


     Tras la vergüenza de unas segundas elecciones, el PSOE entiendo que se oponga, para evitar la pasokización, por lo que los elimino como opción con sentido de Estado en este momento; entiendo y deseo la abstención de Ciudadanos si no hay renovación azul; deseo esta renovación y el consiguiente voto a favor de Ciudadanos; pero ni deseo ni perdonaría a los “políticos del cambio” que se llegara a vislumbrar la posibilidad de terceras elecciones por querer sacar a relucir lo que en mi tierra llamamos “pecho palomo”.


     Rivera: te declaras, con razón, único exponente de la centralidad política en España. Así has actuado hasta ahora para disgusto de izquierda y derecha, y para deleite de tus votantes. Has perdido 300.000 votos gracias a Dios, porque no eran votantes de Centro Liberal y han preferido taparse la nariz y volver al corral. Ahora, eso sí, no te columpies…

domingo, 19 de junio de 2016

Contigo no, bicho.


    Si alguien se quiere ir al partido Liberal o al Conservador, que se vaya
Mariano Rajoy. Valencia, 2008.

    No solo Esperanza Aguirre quedó ojiplática tras esta delirante declaración de intenciones de Mariano I "el escondido". 
    Cánovas del Castillo hacía un respingo en su tumba, y, en el presente, una lista de destacados como Santiago Abascal, María San Gil, Mayor Oreja y otros, comenzaban una fallida búsqueda, puertas adentro, de los principios fundamentales "populares", encontrando únicamente un "sigue buscando".

    Mariano había invitado a cerrar la puerta por fuera a las dos bases ideológicas del Partido, y, ocho años después, los invitados a abandonar el barco han aceptado la oferta. Ahora, Rafaeles Hernandos varios fanfarronean libremente por nuestra vieja piel de toro bajo la protección de don Mariano, que ha conseguido que el barco popular ponga rumbo a ninguna parte.

    Aun así ahora resulta que "Non Plus Ultra" después de nosotros. Que somos nosotros o el caos. Y repiten el eslogan como si ese "nosotros" no fuera ya un caos en sí. Y esperan que el resto de partidos les regalen su escaños sin condiciones, porque ellos lo valen, porque les han votado 2,8 personas de cada 10. Y se sorprenden cuando no se acepta al Mariano de los Luis, sé fuerte o de los yo te quiero, coño. Y criminalizan al Psoe y a quienes hablen con él, mientras le cantan al oído "O tú o nada".

    Mariano, lo comprendas o no, en España no se vota al Presidente, sino al Grupo Parlamentario. Legalmente, el Rey podría hasta proponer a investidura a cualquier persona, esté en listas o no, que sume apoyos parlamentarios. No vendas entonces que votan a tu persona, aunque si tan seguro estás de esto podrías probar a hacer unas primarias...
No, ¿verdad? porque en el fondo sabes que si pudieran, dicho lo dicho, hasta los tuyos te dirían: Contigo no, bicho.